jueves, octubre 27, 2005

La Ciudad de los Villanos. Primera parte.

¡Vaya! Yo dispuesto a pasarme otra semana más viciándome a tope con la Beta del City of Villains y al intentar conectarme hoy resulta que no puedo porque la Beta terminaba justamente ayer día 26. ¡Mecachis! Mira que tengo mala pata.

En apenas 5 días casi no me ha dado tiempo de jugar lo suficiente como para poder darles una opinión más sólida respecto al juego, pero si puedo decirles que con lo poquito que he jugado, me he divertido bastante. Aunque supongo que yo ya estaba más que predispuesto a pasármelo bien antes de comenzar a jugar. Siendo como soy, la idea de poder meterme en el pellejo de un archivillano maléfico me resultaba, como mínimo, interesante, aunque solo fuera por unos días.

Lo que más me ha gustado sin dudarlo es la gran cantidad de posibilidades a la hora de personalizar el aspecto de tu villano. Se le pueden añadir a tu uniforme un buen montón de detalles macabros y terroríficos, no disponibles anteriormente en el City of Heroes, aunque yo personalmente he echado en falta algo un pelín más sangriento. He intentado crearme un Corruptor con aspecto de cenobita de Hellraiser y no he quedado muy satisfecho con el resultado final. Tenía ojos y labios cosidos con hilo y un buen montón de alambre de espino alrededor de los brazos y el torso, pero le faltaba el toque final del pecho cubierto de llagas sangrantes, que le habría dado un aspecto verdaderamente temible. Tras mucho meditarlo finalmente se me ocurrió que si lo que quería era dar miedo de verdad, lo mejor sería probar a crear un pedazo de bestia enorme con cara de pocos amigos. Al final me hice un Brute gigantesco (un Brute en el universo Marvel vendría a ser el Juggernaut, para entendernos) con aspecto de zombi desayunacrios, con verdadera cara de mala hostia. ¡Qué pena que no se me ocurriera sacarle un buen par de capturas de pantalla!

En cuanto al juego en sí, ya logran ponerte en situación, nada más empezar, con el tutorial. Todo comienza con una fuga de la prisión de Parangon, organizada por los hombres de Arachnos para liberarte. A mi me ha parecido una muy buena idea. ¡Eres malo y lo sabes! ¡Estabas en prisión por perro y villano! ¡Y han venido expresamente a sacarte a ti! Mientras escapas, tienes que ir cumpliendo pequeñas misiones, en las que se te van explicando las diferentes mecánicas del juego. Por ejemplo, para aprender a combatir te ordenan que te partas la cara con otros presos fugados, para probar tu valía y cosas así. Lastima que la sensación de ser alguien importante se termine con la misma rapidez con la que se termina el tutorial. Ya una vez en las calles de Rogue Island te conviertes en un don nadie y te vas a tener que ganar la vida como un vulgar ratero de tres al cuarto, realizando misiones de poca importancia a sueldo de otros tipos mucho peores que tú. ¡Nadie dijo que la vida de maleante fuera fácil!

En cuanto a la ambientación está, en mi opinión, bastante lograda. Esta Ciudad de los Villanos vendría a ser una especie de mezcla entre la Genosha de Magneto y el Brasil de Lula. Los ricos viven en buenos apartamentos, en barrios de lujo protegidos en el interior de una especie de fortaleza gigantesca supertecnificada (la fortaleza del propio Arachnos), mientras que los pobres y los mendigos viven en barrios ruinosos, llenos de chabolos infectos, edificios a punto de derrumbarse de puro viejos y callejones oscuros en los que no apetece meterse por lo que pudiera pasar.


Mañana les seguiré contando más cosas del juego...

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